
Una fotografía a color, un buen dibujo arqueológico en 3D o una planimetría escalada es más que suficiente para aportar toda la información de una memoria y el estudio de materiales. ¿O no es tan completo? .
Lo que me ha impulsado a crear este blog es el convencimiento de que la Arqueología debe ser inclusiva, pero de una forma razonable. Tanto para los profesionales como para el público en general.
A lo mejor algunos os preguntáis ¿por qué una arqueología inclusiva? Bajo mi punto de vista, la arqueología debe adaptarse a las necesidades de todos los públicos, en su formación, difusión y divulgación, como ciencia social que es.
Pero ¿cómo se consigue una arqueología inclusiva? La arqueología necesita lo mejor de todos y por ello hay que eliminar barreras, crear nuevas formas de comunicar y hacer entornos accesibles.
No se trata de pensar únicamente en las personas con limitaciones funcionales o con discapacidad (como queramos decir) sinó que hay que pensar en la sociedad como en un todo, sin distinción.
Como dice mi compañero Antonio, lo que es fundamental para el 10% de la sociedad, es necesario para el 40% y confortable para el 100%.